viernes, 1 de mayo de 2020

Luminarias y Rogativas


SEQUÍAS DE PRIMAVERA: ROGATIVAS Y LUMINARIAS


      Termina este abril dejándonos una “primavera loca”. Y no es que haya llovido mucho, no. Pero el campo está “que se sale”. Ha sido un mes muy bueno, “muy yerbero”.
     Según mis cuentas han caído 65 litros en todo este tiempo, y han sido 13 días en los que ha llovido algo. El día más lluvioso cayeron 14 litros.

     Sin embargo, aunque este año ha sido así, no olvidemos que vivimos en una zona que precisamente no se caracteriza por la abundancia de lluvia. Yo, que tengo la curiosidad de medir y apuntar los litros que caen cada vez que llueve, veo que anualmente vienen oscilando entre los 450 y 500 litros. Y esos, son los años buenos.

     A lo largo de la historia, siempre ha habido también periodos de grandes sequías. Eran los que hacían prácticamente imposible la subsistencia de agricultores y ganaderos. Eran
las sequías de la primavera las que más estragos causaban, porque al no llover en esta época, el resto del año era horroroso.

            “Marzo ventoso y abril sin llover, llega mayo y te cagas en él”.

     Entonces empezaban las preocupaciones de la gente del campo. La gente, a diferencia de hoy con las predicciones del tiempo en cualquier medio de comunicación, buscaba y rebuscaba toda la información posible para saber cuando llovería. Confiaba en las “cabañuelas”, “en el nublao Pacha”, en la señales que iba observando en los pájaros, en las culebras…
     Y por supuesto también se acordaba de los Santos para pedir e implorar sus
favores en la concesión del preciado líquido. En cualquier `pueblo de la España Seca, se sacaba en procesión al santo más venerado y se entonaban rogativas para que lloviera.

     Aquí, en Garbayuela, yo he conocido hacerlo de dos maneras: mediante procesiones y haciendo luminarias.

  • Recuerdo como la gente del pueblo, hombres, mujeres y niños de todas las edades, acarreábamos ramoneros, jaras y toda clase de leña que al arder hiciera mucho
    humo, (se creía que así se formaban antes las nubes), haciendo grandes montones en ”el legío” , en “el calvario”, en “el chabarcón” y una vez encendidos, nos “arremolinábamos” en torno a la LUMINARIA, mientras se cantaban canciones con voz melosa y lastimera, con letras como éstas:
Agua, Señor, agua
Agua te pedimos
Porque si no llueve
Se nos seca el trigo.

Los campos se secan
 La hierba no nace
Los animalitos
Se mueren de hambre


Las fuentes se secan
El trigo no nace
Pobres animales
Se mueren de hambre

     Y así, hasta que la lumbre se iba apagando. Después todo el mundo se retiraba con la esperanza de que llovería. Y si en unos días no lo hacía, se volvería a intentar.

     También, como he dicho antes, se hacían rogativas en procesiones, con santo o sin él, pero con mucha fe. Y más o menos se entonaban canciones como las anteriores, pero intercaladas con oraciones y rogativas.

     A todo esto no faltaban los incrédulos que se reían de todas estas parafernalias. Sirva como ejemplo la de aquel que contaba como en un pueblo los feligreses pedían al señor cura que sacara en procesión al santo más venerado para pedir que lloviera. Y el cura respondía:
      -Yo lo saco cuando queráis, pero mirad que el tiempo no está “lloveor”.

     Pero bromas aparte, vuelvo a recordar que vivimos en una zona seca. Que las sequías nos amenazan todos los años. Que sin ir más lejos, el año pasado no cayó prácticamente una gota desde abril hasta septiembre. Y que gracias a los medios y recursos que tenemos “vamos tirando”. Pero que el agua escasea cada vez más, está muy claro. Por eso ahorremos agua y no la malgastemos, no sea que algún día tengamos que volver a las luminarias.

Garbayuela, mayo de 2020.-
Luis A. Agenjo Rivas



4 comentarios:

  1. Luminarias, magia, supersticiones, deseos, peticiones. Todo hecho a la fuerza de la "Naturaleza" nos hace ver la sensación de poca cosa que éramos frente a los fenómenos naturales. Ahora tenemos menos resignación y nos sentimos por encima de todo eso y sentimos que lo podemos dominar nosotros. Cuán ignorantes, creer que la Naturaleza está a nuestro servicio.
    Como no seamos capaces de ser más humildes y más sociables con los bienes que nos da, esa Naturaleza se va a enfadar con nosotros.

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  2. Nosotros decíamos: si quereis que saquemos el santo, le sacamos, pero el tiempo no está de agua. Saludos.

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  3. Dios.Nos Ayuda? Llovera!!

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