Saludos cordiales. Uno de los fines que persigue nuestra Asociación Fuentelamora es recoger historias del pasado y del presente, de nuestro pueblo, Garbayuela, para conservarlas, gracias a las tecnologías actuales es fácil de conseguir y de esta forma transmitírselas a las generaciones venideras para que no olviden su origen.
La recopilación de estas historias la llevamos a cabo de diversas formas:
Recogemos fotografías antiguas, las escaneamos y devolvemos el original a su propietario. Así vamos creando un álbum digital de recuerdos.
Otra forma es: recopilando anécdotas, hechos, casos y dichos, bien a través de terceras personas o, como es el caso que nos ocupa hoy, de viva voz, con el propio protagonista.
Se trata de una persona muy conocida en Garbayuela y comarca.
Emprendedor desde muy joven, con 18 años ya era Instalador electricista autorizado, el único en estos territorios. Posteriormente fué operador de cine, mecánico, taxista y comerciante.
Todo un personaje.
No es de extrañar esta actitud y esa aptitud para llevar a cabo todo lo que se propuso. Ya al nacer lo traía en la sangre. Vino al mundo predispuesto a ello, aún sin saberlo. Heredó de su abuelo Heliodoro ese afán de experimentar, esa vocación de ayudar a los demás, a su manera, que no fué otra que eligiendo profesiones con un marcado carácter público.
Hablo de FELIPE MARTÍN ALCOBENDAS.
Le invité a que nos explicara el funcionamiento de la máquina de gaseosas, de los años 50, que tenemos en nuestro-vuestro Museo Etnográfico y Arqueológico, que se halla en el “lejío” frente a la fuente, y, allí charlando, descubrí a una persona orgullosa de sus antepasados, amante de su familia y satisfecha de su trayectoria profesional y vital.
Recuerdo una anécdota con Felipe: hace muchos años, fuimos una mañana temprano, a por juncia a Tablacorta, porque las vecinas de ese rincón de la plaza habían puesto un altar, puesto que era el día del Corpus. Paralelo a la pista va el tendido eléctrico con sus postes. Felipe, para el coche y me dice: “ Si te pones en uno de ellos y miras a los otros, verás qué línea recta tan bien definida”. Me contó que la habían montado ellos. Y en su tono, al decir aquello, noté la satisfacción de un profesional por un trabajo bien hecho.
Dejo aquí el enlace. Pincha en: ver el vídeo
Justo Para Agenjo